Según un estudio de la Universidad de Michigan, la gente que corrige los errores ortográficos ajenos, son una verdadera molestia.
Esto ocurre no sólo porque están señalando tus defectos, sino también por que encima, piensan que te están haciendo un favor.
La investigación buscó la conexión entre la personalidad de las personas que corrigen y su impulso por hacerlo. Para eso les hizo leer a 80 personas, un lote de correos electrónicos que contenían errores de escritura y gramaticales.
Los resultados arrojaron que las personas extrovertidas suelen no corregir los errores de las personas, en cambió sí lo hacen los más introvertidos. Otro dato que se obtuvo, es que a estas personas les cuesta más ser simpático y agradable para los demás.
Además, estas mismas pruebas enfocadas en la relación interpersonal en línea, apuntan a que estas personas son, de forma general, menos abiertas y más propensas a juzgarte por tus errores.
